La Urología Reconstructiva se encarga de la reparación quirúrgica de trastornos, congénitos o adquiridos, que afectan la función, la anatomía o el aspecto cosmético de los órganos del sistema genitourinario, tanto en el hombre como en la mujer. Habitualmente estos trastornos aparecen como una consecuencia de los tratamientos del cáncer, traumatismos, infecciones, cirugías o malformaciones congénitas.
Muchas veces estas anomalías son tratadas de manera sub-óptima o incompleta debido a la limitada experiencia existente en la mayoría de los hospitales y clínicas chilenas en el campo de la reconstrucción genitourinaria. Por esta razón no es infrecuente que estos pacientes sean operados repetidas veces sin lograr un resultado satisfactorio.